¿Ha decretado el Tribunal Supremo el final del aforamiento?

El Tribunal Supremo se ha declarado » no competente» en la querella del exjuez Castellón contra Ione Belarra por vulneración del honor y le ha indicado que «debe presentar su demanda contra Ione Belarra en los tribunales ordinarios«. Ello significa que el Supremo ha cometido una grave trasgresión de la Constitución que señala expresamente que «políticos y jueces están aforados en su tarea pública«. El aforamiento es una prerrogativa que confiere a ciertas personas un fuero especial para ser juzgadas en casos de delito, distinto al de los ciudadanos comunes.

Dicha decisión supone de facto que políticos y jueces dejarían de ser aforados cuando se expresen fuera de la tribuna política, por lo que es previsible que dicha decisión del Supremo sea recurrida ante el Tribunal Constitucional mediante una solicitud de amparo.

Así, el Constitucional deberá poner coto a los desmanes jurídicos del Supremo  y reafirmar el aforamiento de los representantes públicos en todas sus facetas diarias.