Catalina de Erauso | Discurso de odio en el corán
Judaísmo y cristianismo son junto con el islam las tres religiones abrahamíticas. El código moral y ético de judaísmo y cristianismo son los 10 mandamientos de Moisés. Según la Biblia, Abraham es una figura central de los tiempos del Antiguo Testamento en el que se le presenta como padre de Israel. El corán no tiene ese anclaje ético, pero alude a la Biblia en incontables aleyas. Ordena la muerte de judíos y cristianos, entre otros grupos religiosos, por el mero hecho de ser judíos y cristianos.
Judíos y cristianos son omnipresentes en el corán. Del hijo de Abraham, Ismael -dice el relato islámico- que descendía Mohamed. El corán, que se autoproclama como la palabra de Alá (Dios) inalterada e inalterable, recoge órdenes que son de obligado cumplimiento por el mero hecho de ser palabra de Alá.
El corán hace referencia a judíos y cristianos en numerosas ocasiones. Se puede decir que casi la mitad del corán está dedicado a los infieles, entre los que se encuentran judíos, cristianos, zoroástricos, politeístas, ateos y apóstatas. De hecho, el corán introduce a judíos, cristianos y sabeos como gentes del libro o escritura (recibieron la Biblia) (2:62) a los que Dios les entregó unas leyes que luego desobedecieron y el Corán (la revelación de Alá) viene a castigarlos por su desobediencia.
A los cristianos se les denomina también asociadores porque no creen en la unidad de Dios sino en la Trinidad y a los judíos se les denomina también israelitas. El corán no menciona ni una sola vez el concepto de Palestina. El corán recoge algunos relatos bíblicos tergiversados o simplemente erróneos, lo que desfigura por completo su mensaje. En el relato que se urde con estos elementos y otros de origen pagano, el Corán deshumaniza, criminaliza y ordena a los creyentes a luchar contra judíos y cristianos de diferentes formas también asesinándolos.
Quien le diga que lo anterior es una interpretación interesada, puede leer la introducción a la historia Muqaddimah de Ibn Khaldun (1332-1406) que dedica el subcapítulo 31 a “Comentarios sobre las palabras «Papa» y «Patriarca» en la religión cristiana y en la palabra «Kohen» usada por los judíos.” Ibn Khaldun no es un sabio cualquiera sino el autor del libro de referencia de la historia del islam. Nombra el concilio de Nicea del año 325 donde se fijaron las pautas del credo del cristianismo. Después del primer concilio hubo disputas y cismas de las que surgieron 3 sectas: los melquitas, nestorios y jacobitas. Así se refiere a ellos Ibn Khaldun:
«No creemos que debamos ennegrecer las páginas de este libro con la discusión de sus dogmas de incredulidad. En general, son bien conocidos. Todos ellos son incrédulos. Esto está claramente establecido en el noble Corán. Debatir o discutir esas cosas con ellos no depende de nosotros. Es (para ellos elegir entre) la conversión al Islam, el pago del impuesto de capitación o la muerte.» Muqaddimah, página 306 de la version pdf.
Todos ellos son no creyentes según su criterio. El impuesto de capitación es una cantidad que deben pagar judíos y cristianos para poder quedarse a vivir en un país islámico. Ojo, esto es válido para aquellos que deseen emigrar a un país islámico pero también para aquellos que han sido invadidos por las huestes del sátrapa islámico de turno. Es decir, deben pagar a su invasor. No es una cita única del corán ni un episodio singular sino que este tipo de discurso se repite durante toda la historia del islam porque dimana de la aleya 9:29.
Quien diga lo contrario, falta a la verdad. Este impuesto legitimado por el corán se ha venido recaudando desde que surgió el islam. Que hubiese épocas benévolas en las que no se recaudó no quiere decir que un futuro sátrapa no lo ponga en práctica. Veamos pues, qué azoras hacen referencia a estos cuatro puntos.
En primer lugar, el Corán establece que aquellos que creen en Alá se ganarán el cielo tal y como señala la azora 2:62.
- 2:62. Los creyentes, los judíos, los cristianos, los sabeos, quienes creen en Alá y en el último Día y obran bien, ésos tienen su recompensa junto a su Señor. No tienen que temer y no estarán tristes.
Pudiese parecer que tanto judíos y cristianos están a salvo si practican sus respectivas fes, pero no es así porque después vienen los reproches que son numerosísimos en el corán y los hadices. Los reproches vienen por haber desobedecido a Alá, por haber asociado a más dioses al dios único o por creer que Jesús resucitó. Solo por eso se ha de luchar contra estos colectivos. La lucha contra judíos y cristianos no es porque estos hayan cometido delitos sino por creer que Jesús no era profeta (judíos) y Jesús resucitó (cristianos).
Judíos y cristianos corrompieron la Biblia
Según el relato islámico, judíos y cristianos corrompieron la Bilbia. No hay ninguna fuente que establezca cuándo ocurrió esto. Ni tampoco se dan demasiados detalles sobre de qué forma ocurrió aparte de la creencia islámica de que Jesús no resucitó y no es parte de la Trinidad. Se insinúa de forma muy superficial que lo que la Biblia original mandaba es algo diferente a lo que se leía en ella en tiempos de Mohamed. Prueba de ello es la azora 2:135 quien otorga la condición de creyente al 100% a Abraham y por creyente se entiende creyente en el la supuesta Biblia impoluta que no es otra cosa que el corán según el relato islámico estándar.
Además, los cristianos asociaron a Dios otras entidades (4:171), entiéndase la Trinidad, lo que según el relato islámico los convierte en politeístas y los judíos trataron a Jesús como embustero y no como profeta. Llama la atención que Allah todopoderoso informase de estos reproches al nuevo profeta Mohamed y no a aquellos que supuestamente estaban errando y deambulando por un camino falso.
- 2:135. Dicen: «Si sois judíos o cristianos, estáis en la vía recta». Di: «No, antes bien la religión de Abraham, que fue hanif (pura, auténtica o monoteísta) y no asociadora».
- 4:171 ¡Judíos y cristianos! No os propaséis en materia de vuestra religión. No atribuyáis a Dios más que la Verdad. Pues el Mesías, Jesús, hijo de María, no es más que un Enviado de Dios, es (el producto de) la palabra «sé» y de un soplo que Él había dirigido a María (por medio del arcángel Gabriel). Creed, pues, en Dios solo y tened fe en todo lo transmitido por Sus Enviados. No habléis de Tres (dioses), ni volváis a pronunciarlo, porque es mejor para vosotros. Pues Dios es un Dios Uno. Él está muy por encima de tener un hijo. Suyo es cuanto hay en el Cielo y en la Tierra. Bastante tenéis con que Dios lo gobierna todo.
Esta azora viene a decir que la religión de Abraham, la verdadera, la que fue revelada por Alá, ha sufrido cambios a lo largo de la historia. En la misma línea, y concretando aún más, la aleya 3:67 dice que Abraham se sometía a Alá, dando por hecho que los creyentes cristianos y judíos de la época de Mohamed no lo hacían. De ahí que diga que era hanif, es decir monoteísta. La desobediencia es un pecado en el islam porque la sumisión es su pilar fundamental. La sumisión es a Alá y a todos aquellos que se encuentren por encima de uno en la jerarquía religiosa, también al imam.
- 3:67. Abraham no fue judío ni cristiano, sino que fue hanif, sometido a Alá, no asociador.
Dicho esto, el corán también afirma que la humanidad era monoteísta desde el principio de los tiempos (10:19).
- 10:19 En un principio, los humanos no formaban más que una sola comunidad (monoteísta). Luego, disintieron entre sí, y si no fuera por una decisión previamente enunciada por tu Señor (de tolerar a los paganos hasta el día del Juicio), Él los habría sentenciado de inmediato, poniendo fin a sus discrepancias.
El Corán cataloga a los cristianos trinitarios como no creyentes o infieles. Recordemos que el corán prevé el asesinato de los no creyentes por el mero hecho de no creer en Alá.
- 5:72 Son no creyentes los que dicen que Jesús es el hijo de Dios.
- 9:30 Los cristianos dicen: Jesús es el hijo de Dios. Que Alá los destruya.
El Corán considera que la Biblia fue corrompida por los judíos (4:46) porque, entre otras cuestiones, establece que Jesús no fue crucificado (4:156-157), sino que Alá engañó al público presente sustituyendo al crucificado por Jesús. También se afirma que algunos tergiversaron la Biblia inventando mentiras sobre Dios (3:78).
- 4:46. Algunos judíos alteran el sentido de las palabras y dicen: «Oímos y desobedecemos… ¡Escucha, sin que se pueda oír! ¡Raina!», trabucando con sus lenguas y atacando la Religión. Si dijeran: «Oímos y obedecemos… ¡Escucha! ¡Unzurna!», sería mejor para ellos y más correcto. Pero Alá les ha maldecido por su incredulidad. Creen, pero poco.»
- 4:156. …por su incredulidad por haber proferido contra María una enorme calumnia, 157. y por haber dicho: «Hemos dado muerte al Ungido, Jesús, hijo de María, el enviado de Alá», siendo así que no le mataron ni le crucificaron, sino que les pareció así. Los que discrepan acerca de él, dudan. No tienen conocimiento de él, no siguen más que conjeturas. Pero, ciertamente no le mataron.
- 3: 78 Entre ellos, hay también quienes tergiversan la Escritura para daros a entender que es parte de la Torá, pero no lo es; y os dicen que es una Revelación de Dios, pero tampoco es una revelación. Inventan mentiras y, a ciencia y conciencia, se las atribuyen a Dios. 79 No es propio de un humano a quien Dios le confiere el Libro, la administración de la justicia y la profecía, que diga a la gente: «Rendidme culto a mí, no a Dios». Dirá más bien: «Sed doctores de la Ley, pues sois vosotros quienes enseñáis y estudiáis el Libro».
Relato anticristiano
El Corán tiene un fuerte discurso anticristiano en la azora 4 y reaparece en muchas otras. El islam no acepta el relato de Padre, Hijo y Espíritu Santo del cristianismo trinitario, mayoritario a día de hoy, arguyendo que los profetas eran solo hombres sin ningún vínculo consanguíneo con Dios (17:11, 21:7, 16:43). Ensalza el buen creer de los fieles musulmanes contraponiéndolo a la falsa creencia del cristianismo (3:11).
- 4:171. ¡Gente de la Escritura! ¡No exageréis en vuestra religión! ¡No digáis de Alá sino la verdad: que el Ungido, Jesús, hijo de María, es solamente el enviado de Alá y Su Palabra, que Él ha comunicado a María, y un espíritu que procede de Él! ¡Creed, pues, en Alá y en Sus enviados! ¡No digáis ‘Tres’! ¡Basta ya, será mejor para vosotros! Alá es sólo un Dios Uno. ¡Gloria a Él! Tener un hijo… Suyo es lo que está en los cielos y en la tierra… ¡Alá basta como protector!
- 17:111. Y di: «¡Alabado sea Alá, Que no ha adoptado un hijo, ni tiene asociado en el dominio, ni amigo frente a la humillación!» ¡Y ensalza Su grandeza!
- 21: 7 (¡Muhammad! Haz recordar a tu pueblo que) ninguno de Nuestros enviados que te precedieron eran sino hombres a quienes revelamos los mensajes que tenían que comunicar. (Diles: «¡Escépticos!): Preguntad a los eruditos (de la Biblia) si de veras lo ignoráis».
- 16:43 (Lo mismo que en tu caso, Muhammad), nunca enviamos sino seres humanos a quienes previamente revelamos un Mensaje. Y si (tu pueblo) lo ignora, ¡que lo pregunte a los doctores de la Biblia!
- 3:110 Sois la mejor comunidad humana que jamás se haya suscitado: ordenáis lo que está bien, prohibís lo que está mal y creéis en Allah. Si la gente de la Escritura creyera, les iría mejor. Hay entre ellos creyentes, pero la mayoría son perversos.
A pesar del relato coránico hostil contra los que siguen el credo trinitario, el propio Corán el que se adhiere al discurso trinitario (5:110). Quien lo recitó o escribió cometió un error monumental porque afirma que Jesús recibió el evangelio como revelación y sabemos que el evangelio es el relato de la vida de Jesús escrita por sus discípulos.
- 5:110. Cuando dijo Alá: «¡Jesús, hijo de María! Recuerda Mi gracia, que os dispensé a ti y a tu madre cuando te fortalecí con el Espíritu Santo y hablaste a la gente en la cuna y de adulto, y cuando te enseñé la Escritura, la Sabiduría, la Tora y el Evangelio. Y cuando creaste de arcilla a modo de pájaros con Mi permiso, soplaste en ellos y se convirtieron en pájaros con Mi permiso. Y curaste al ciego de nacimiento y al leproso con Mi permiso. Y cuando resucitaste a los muertos con Mi permiso. Y cuando alejé de ti a los Hijos de Israel cuando viniste a ellos con las pruebas claras y los que de ellos no creían dijeron: ‘Esto no es sino manifiesta magia’.
Criminalización de los judíos
Algunos hadices criminalizan a los judíos con narrativas inverosímiles como es la de Al-Bujari, 1401.
- Anas bin Mâlik también relató que el Profeta dijo: «Si no fuese por los israelitas la carne no se pudriría y si no fuese por Hawwâ’(Eva) las mujeres no engañarían a sus esposos» Al-Bujari, tomo 55, hadiz 1401.
También en el corán se describe a los judíos como animales. El la azora 5:30 se dice que Allah maldijo a los judíos y los convirtió en cerdos y monos por adorar el mal y desoír sus órdenes. No olvidemos que lo que se lee en las mezquitas es el corán con los relatos más arriba mencionados sin relativizar y haciendo hincapié en el relato demonizador de los no creyentes.
Por estos motivos teológicos se teje todo un entramado narrativo deshumanizador que culmina en relatos criminalizadores de judíos y cristianos tanto en el Corán como en los hadices. Pero hace la diferencia entre cristianos trinitarios y no trinitarios, como lo muestra la azora 5:82. Los asociadores son los cristianos trinitarios, hoy mayoría. Los cristianos no trinitarios a día de hoy son los Testigos de Jehová y las iglesias pentecostales unicitarias modernas que resurgen a partir de 1913.
El trinitarismo se estableció como doctrina de fe en el Concilio de Nicea -hoy Iznik en Turquía- (año 325 d.C.). Para ponerlo en contexto, la ruptura entre iglesia católica y ortodoxa ocurre en el año 1054. Antes del Concilio de Nicea y después hubo numerosas disputas teológicas entre trinitarios y no trinitarios.
Los breves apuntes más arriba nos dan una idea del discurso de odio urdido en el corán porque deshumaniza y señala a determinados grupos de personas ordenando su exterminio. Todo esto es contrario a la declaración de Derechos Humanos de 1948 y a los ordenamientos jurídicos vigentes en todos los países democráticos del mundo. Es lo que se enseña en las mezquitas porque la palabra de Alá es inalterable. Cristianos y judíos alteraron el significado de la Biblia y, por lo tanto, merecen la muerte según el relato islámico estándar.