Catalina de Erauso |El poderoso gestiona el recuerdo y también el olvido
Las noticias son en estos tiempos moscas de un día porque los que hacen negocio con los datos dominan a la perfección las técnicas de manipulación, desinformación e intoxicación. No son los medios independientes los que ponen el foco en un determinado problema sino que son los dueños de los periódicos los que deciden cómo crear ruido y humo con determinadas «noticias» al objeto de ocultar otras.
Me decía un amigo que el periodista debe ponderar. Querido amigo, ¿dónde está la linde entra la ponderación y la manipulación? Muy sabio él, me dirá que está en la intención del periodista. Querido sabio, ¿cómo sabe el lector que el periodista tiene malas intenciones? Hagamos, pues, memoria. El lector deberá sacar sus propias conclusiones con estos datos.
Legislación europea sobre las víctimas del terrorismo
El eurodiputado de justicia Didier Reynders anunció en febrero de 2023 que se revisaría la directiva sobre las víctimas del terrorismo durante 2023 a raíz de la pregunta parlamentaria firmada, por ocho europarlamentarios. En concreto preguntaron «¿qué medidas puede adoptar la Comisión para defender los derechos de las víctimas de crímenes de Estado cuando el Estado miembro en cuestión está vulnerando dichos derechos?».
Esta pregunta se formuló a raíz de las declaraciones del exministro de Interior Barrionuevo en el periódico El País justificando el terrorismo de estado. Dentro de la Unión Europea existe un Centro Europeo para el Asesoramiento de las Víctimas del Terrorismo que acompaña a las víctimas de violencias terroristas y sexuales, entre otras. El Manual de la UE sobre las Víctimas del Terrorismo no dispone de un apartado especial de las víctimas de terrorismo de estado.
Y en el caso de España, la práctica mayoría víctimas del terrorismo de estado no cuentan como víctimas de terrorismo. Existe una nueva propuesta de ley para reforzar los derechos de las víctimas de delitos que después de su aprobación deberá implementarse en cada uno de los países miembros de la UE. El texto solo está disponible en inglés en la actualidad, pero no incluye nada respecto a las víctimas de terrorismo de estado. Por definición, el terrorismo de estado no existe en Europa.
La crispación es una herramienta de la que se valen los partidos con ideologías totalitarias. Filoetarra significa que se está en sintonía con la ideología separatista de ETA y fascista es que uno se adhiere a la ideología totalitaria,ultranacionalista, antidemocrática que dirigió los designios de Europa en el siglo XX. ¿Y por qué les cuento esto? Porque alguien me tildará de filoetarra por las siguientes líneas.
Ascensos y condecoraciones en las Fuerzas Armadas
El Ministro de interior ha ascendido a Arturo Espejo al rango de teniente general y dicen que solo hay cinco en España. Con razón, titula Patricia López Manicomio de Interior. Este guardia civil estuvo custodiando a Mikel Zabalza que luego aparecería muerto en el río Bidasoa. Estaba recién operado, no sabía nadar y la versión oficial de la guardia civil rezaba que Zabalza logró escaparse de una patrulla de la guardia civil compuesta de tres efectivos. Lo habría hecho a nado. El ascenso de Arturo Espejo es uno más de centenares de ascensos como el de Galindo -torturador de Intxaurrondo-, condecoraciones y premios en forma de medallas pensionadas como la concedida a Billy el Niño.
Es muy revelador que un exministro (1982-1988) de un estado democrático en el seno de la Unión Europea manifieste en 2022 en un periódico de amplia difusión que ordenó liberar a un anciano secuestrado por un grupo de la policía en 1983. Ojo, dijo un grupo de la policía. En 1983, los GAL reivindicó el secuestro de Santiago Marey. Por tanto, el GAL se nutría de funcionarios de policía o el GAL era la policía. Si Barrionuevo ordenó liberarlo, tal vez también ordenó secuestrarlo.
Pero, la cosa va más allá. No ordenó secuestrar en territorio francés a ese anciano desde el Ministerio de Interior de España sino a otra persona. De ahí que el entonces ministro ordenase liberar a Marey cuando supo que los mercenarios o policías que había contratado se equivocaron de persona. Este secuestro ordenado desde el Ministerio del Interior de España se perpetró bajo las siglas de GAL (Grupos Antiterroristas de Liberación) que perpetraron 29 asesinatos.
Por tanto, ¿era Barrionuevo el cabecilla de los GAL? ¿Qué decisión habría tomado el ministro, hijo del vizconde de Barrionuevo, de haber secuestrado a la persona clave? Todas estas preguntas y muchas más han llegado a la Comisión Europea. El exministro Barrionuevo ordenó la liberación de un anciano secuestrado. Sería muy grave en cualquier democracia.
Grupos terroristas tardofranquistas y la legislación penal
Pero hubo otros grupos terroristas de extrema derecha que actuaban con diferentes siglas en Euskadi y Navarra en los años 70 y 80 del siglo pasado, a saber: BVE (Batallón Vasco Español), Triple A (Alianza Apostólica Anticomunista), ATE (Antiterrorismo ETA), ANE (Acción Nacional Española), GAE (Grupos Armados Españoles) y Guerrilleros de Cristo Rey antes de la aparición del GAL. Todos ellos comparten varios denominadores comunes. Todos ellos perpetraban atentados contra bienes o personas– en más de 70 ocasiones mortales- que habían clasificado como simpatizantes de la izquierda abertzale.
Además, una ínfima parte de las centenas de atentados de la guerra sucia fue investigada y casi nadie fue juzgado. Los pocos que fueron juzgados, fueron después indultados, condecorados y ascendidos. Por tanto, cabe preguntarse si también esas siglas obedecían las órdenes del mismo amo. Está meridianamente claro que eran grupos terroristas según la definición del Código Penal:
El Código Penal de 1995 se reformó en 2015 incorporando algunos cambios en cuanto a bandas terroristas. Definió organización terrorista aquella organización que pretenda un (573.1) acto terrorista “la comisión de cualquier delito grave contra la vida o la integridad física, la libertad, la integridad moral, la libertad e indemnidad sexuales, el patrimonio, los recursos naturales o el medio ambiente, la salud pública, de riesgo catastrófico, incendio, contra la Corona, de atentado y tenencia, tráfico y depósito de armas, municiones o explosivos, previstos en el presente Código, y el apoderamiento de aeronaves, buques u otros medios de transporte colectivo o de mercancías, cuando se llevaran a cabo con cualquiera de las siguientes finalidades.“
El artículo 578 pone pena “El enaltecimiento o la justificación públicos de los delitos comprendidos en los artículos 572 a 577 o de quienes hayan participado en su ejecución, o la realización de actos que entrañen descrédito, menosprecio o humillación de las víctimas de los delitos terroristas o de sus familiares, se castigará con la pena de prisión de uno a tres años y multa de doce a dieciocho meses.
Vivir en un país de la UE con dos varas de medir
Lo que más debería preocuparnos es la doble vara de medir de la justicia, el cierre de casos de asesinatos perpetrados por esas bandas terroristas tardofranquistas, la condecoración de servidores públicos que perpetraron atentados mortales cumpliendo órdenes de superiores policiales, el menosprecio a las familias de las víctimas tanto en la vía pública como en los medios de comunicación difundiendo infundios sobre ellas con total impunidad. Cuando la justicia cierra decenas de casos de atentados mortales contra ciudadanos que considera de su país, algo no funciona. Imaginémonos ahora un atentado de ETA.
¿Se cerraría el caso después de pocos meses de abrirlo? ¿Qué pasaría si se vilipendiase a sus víctimas tal y como han hecho Barrionuevo, Vera, Amedo y otros muchos policías involucrados en la guerra sucia en innumerables ocasiones? Claro que no. Cuando la justicia es lawfare no es justicia. Y quien crea que su caso se juzgará en un juzgado de España de acuerdo con total imparcialidad, yerra.
El artículo 14 de la Constitución dice que todos somos iguales ante la ley, pero la actuación de la justicia y gobiernos excarcelando a Barrionuevo y los demás condenados con un indulto parcial de Aznar del PP tres meses y medio después de entrar en la cárcel nos demuestran que ese artículo es una engañifa. Indultar a alguien que ha perpetrado actos terroristas es inmoral, pero la política está poblada de personajes inmorales.
El silencio cómplice de lápices mercenarios
A mí me provoca angustia la sola idea de tener que ponerme en las manos de un juez en España porque sé que me encuentro en una condición de total vulnerabilidad. Nadie me indultaría. Pero mucho más miedo me da el silencio mediático al respecto. Todos los españoles saben que se perpetraron muchos asesinatos ordenados desde el Ministerio de Interior en la España de después de Franco, pero esas víctimas no son tales en sus imaginarios porque los medios de comunicación han construido un relato criminalizando la ideología abertzale, por ende, a esas familias que perdieron maridos, hijos y hermanos porque algún funcionario aventajado creyó que pertenecía a la izquierda abertzale y consideraba que debían ser eliminados.
Los medios de comunicación de España hicieron el resto. Son la correa de transmisión que ha posibilitado que muchos de esos crímenes queden impunes porque lejos de crear alarma en la ciudadanía lograron que sintiesen empatía hacia los perpetradores y les vitoreasen cuando eran condecorados. Los medios sí logran movilizar a la gente contra la guerra de Ucrania pero jamás hicieron lo propio con lo que estaba ocurriendo en Euskadi con las siglas BVE, Triple A, ATE, GAE, ANE, GAL y afines.
Documental «País Vasco y libertad» de Thomas Lacoste
No hace mucho, el director de cine francés Thomas Lacoste rodó un documental que no fue emitido por las televisiones públicas de España debido a las presiones sufridas desde partidos políticos como Ciudadanos. Solo lo emitió ETB. En artículo de El Hurón este enlace y en los enlaces a pie de página se puede leer un resumen del documental.
El Magistrado Portelli de la Corte de Apelación de París se pronuncia sobre la guerra sucia en España en este fragmento de Pays Basque et liberté.
No recuerdo ninguna movilización de ninguna índole contra estas siglas tardofranquistas. Solo recuerdo la pregunta de Iñaki Gabilondo a Felipe González. ¿Organizó usted el GAL?