Las compañías aéreas son unas de las principales fuentes de ingresos de los periódicos del régimen, y los responsables del ABC no quieren disgustarlas. Por eso, el diario derechista sacó el día 25 de marzo una edición fantasma en papel destinada únicamente al consumo de los pasajeros en la que no se mencionaba el accidente aéreo del avión de Germanwings.